Como he contado en muchas ocasiones tuve un cáncer de ovarios con 26 años del que hoy en día estoy felizmente curada. Tampoco me gusta identificarme con una enfermedad que ya pasó y sentirme “etiquetada” por ello, pero es cierto que implicó una operación de extirpación de mis ovarios, útero, trompas de falopio, etc y que aún hoy en día tengo secuelas. Es decir que desde los 26 años que no tengo la menstruación y mis niveles de estrógenos y progesterona son muy bajos. Seguro que has oído hablar que a partir de la menopausia hay mucho más riesgo de sufrir osteoporosis, así que en este post voy a intentar a explicar el porqué y como me cuido ante una menopausia tan precoz.
Nuestros huesos, aunque parezcan un ente “inmóvil” están en constante construcción y deconstrucción. En el interior del hueso tenemos dos tipos de células principales:
- osteoblastos: són células formadoras de hueso. Cuando han acabado de crear hueso se quedan atrapadas en su propia matriz conviertiéndose en osteocitos.
- osteoclastos: derivados de monocitos que se encargan de “esculpir” es decir que rompen el hueso para permitir su remodelación.
Cuando estas células trabajan en equilibrio no hay ningún problema pero la bajada de estrógenos desencadena un desequilibrio entre los dos tipos de células promoviendo el descenso de la actividad del los osteoblastos y el aumento de la de los osteaclastos, es decir una bajada de la densidad y calidad ósea = osteoporosis
El metabolismo del Calcio no es menos importante en relación a la osteoporosis. Este elemento es de vital importancia no solo para nuestros huesos, sino que forma parte de funciones tan importantes como las sinapsis neuronales o la regulación del PH. Dependiendo de las necesidades del organismo, el Calcio pasará de sus depósitos (hueso) a la sangre/tejidos/células o al revés. Si hay mucha necesidad de Calcio en nuestro organismo la hormona Parathormona de la paratiroides incentivará a los osteoclastos a destruir hueso para liberarlo en la sangre y si tenemos mucho Calcio circulando, la hormona osteocalcina de la tiroides detendrá el aumento de los niveles de calcio en sangre deteniendo su reabsorción.
Ahora que sabemos un poco como ocurre la osteoporosis seguro que estaréis pensando que con osteoporosis o riesgo de osteoporosis la solución es fácil: tomar muchos lácteos. Es cierto que la leche de vaca contiene niveles de Calcio muy elevados (120mg/l) pero es un alimento muy acidificante y como he dicho antes el Calcio también regula nuestro PH. Por lo que cuando consumimos lácteos también se usa Calcio reserva del organismo para equilibrar la acidificación que provoca. Los estudios del doctor Michelsson de la Universidad de Upsala, demuestran que el aumento del consumo de lácteos no era un factor protector ante las fracturas por osteoporosis. De hecho os países con alta ingesta de lácteo animal (como EUA, Suecia, Noruega) hay más número de fractura por osteoporosis que en países con muy baja ingesta como Japón o China.
Incluir en nuestra dieta fruta y verdura fresca y evitar alimentos procesados ayudarán a mantener nuestro PH con tendencia alcalina y tomar alimentos ricos en calcio sin ser acidificantes como: sésamo, almendra, brócoli, chía, algas o coles. El estrés también aumenta las necesidades de Calcio, así que su disminución colaborará a bajar el riesgo de descalcificación.
Lo que si se ha comprobado que estimula a los osteoblastos a formar hueso es el deporte. Las tracciones que generan los músculos sobre el hueso, son el “gatillo” de la formación de hueso, por eso es 100% recomendable ejercicio con cierto impacto y también de fuerza, siempre adaptado al grado de descalcificación de la persona.
También es de suma importancia la vitamina D, que entre muchas otras funciones ayuda a la fijación del Calcio al Hueso. Por eso es recomendable tomar el Sol unos 20 minutos al dia y tomar grasas saludables que son las precursoras de la vitamina.
También os recomiendo tomar grasas saludables y las vitaminas del grupo B y el Zinc, como precursores o cofactores hormonales y para evitar otros efectos de la menopausia como la sequedad o los cambios de humor.
El abordaje médico habitual en un caso como el mío son hormonas sintéticas. Yo valore los pros y contras y opté por equilibrarme de formas más naturales. No quiere decir que sea la mejor opción, es lo que decidí para mi misma. No soy quién para recomendarlas o no, es trabajo de los médicos y según cada caso, pero es cierto que aumentan el riesgo de cáncer de mama por ejemplo. Yo soy más partidaria de tomar fitoestrógenos sea en la dieta (soja, alfala, o legumbres en general) o en suplemento y sobretodo combinar: deporte + vitamina D + dieta que favorezca alcalinidad + evitar làcteos animales
¡Espero que os haya parecido interesante!
Abrazo
M.
Milk is a poor preventer of osteoporosis [Internet]. sciencenordic.com. 2018 [cited 29 January 2018]. Available from: http://sciencenordic.com/milk-poor-preventer-osteoporosis
Rincón-Sierra O, Díaz-Yamal I, Pérez-Agudelo L. Pathogenesis of osteoporosis: the role of estrogen [Internet]. Scielo.org.co. 2018 [cited 29 January 2018]. Available from: http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-74342007000200008